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jueves, 23 de septiembre de 2010

Evitar accidentes en el auto

Los accidentes de auto son más comunes de lo que crees y aunque no se difunden tanto en los medios como cuando se estrella un avión o un tren, la cantidad de personas que mueren en choques automovilísticos es mucho mayor. A veces pensamos que estamos exentos de que nos ocurra algo porque sentimos que manejamos demasiado bien, pero por más precavido que seas y más bien que conduzcas, los accidentes no dependen solamente de nosotros, existen factores externos como la distracción de otros conductores, las condiciones climáticas o fallas en el camino que pueden hacer que terminemos muy mal.
Pero como no siempre los accidentes son por causados por un tercero, aqui algunos consejos para evitar una tragedia.
1. Elimina las distracciones en la medida de lo posible.- No hables por teléfono, evita irle cambiando al radio o al MP3, no comas, no leas; si eres mujer, no te maquilles con el coche en movimiento y si se te cae algo al piso no lo recojas hasta que estés completamente parado; por más rápido que hagas cualquiera de estas cosas, te resta atención al camino aumentando el riesgo de accidente.
2. No manejes con sueño.- Tal vez estás cansado de oírlo, pero basta con quedarte dormido un segundo para perder por completo el control del auto, lo cual puede terminar en una tragedia.
3. Sal con tiempo.- Al conducir con prisa tu nivel de estrés aumenta, y por tanto, el riesgo de accidente; una persona apurada es más atrabancada, se le quiere meter a todo el mundo y su velocidad promedio es mayor, lo cual, a la hora de un accidente, puede tener consecuencias más severas.
4. Respeta los señalamientos y las condiciones climáticas.- Si está lloviendo baja tu velocidad, si la lluvia es muy pesada, enciende tus luces intermitentes, si hay neblina, activa los faros de niebla. De igual manera, si ves una señal diciendo que reduzcas tu velocidad o que no rebases, hazle caso, por algo la pusieron.
5. No es necesario ir tan rápido.- Evita conducir a velocidades muy altas todo el tiempo, si tienes que frenar inesperadamente y vas a una velocidad moderada, tendrás mayor control del vehículo y una mejor capacidad de reacción.

Cuidados para un auto nuevo


1. No aceleres bruscamente, hazlo suave y paulatinamente.
2. Evita sobrepasar las 3 mil revoluciones por minuto o, por lo menos, mantente por debajo de la línea roja del tacómetro.
3. Si tu auto es estándar, mantén las velocidades por arriba de las mil revoluciones por minuto; tampoco es bueno que lo lleves a bajas revoluciones durante periodos de tiempo prolongados.
4. No excedas los tres cuartos de la velocidad máxima que puede alcanzar tu vehículo; muchas veces el velocímetro marca más de lo que puede alcanzar, pregunta en la agencia cuál es su tope de velocidad real y en base a esto realiza el cálculo.
5. Checa la temperatura periódicamente para cerciorarte que el sistema de enfriamiento esté funcionando correctamente.
6. Evita usar el aire acondicionado durante los primeros 500 kilómetros; este mecanismo le resta potencia al motor obligándonos a acelerar más, lo cual le exige un mayor esfuerzo al tren motriz.
7. Frena con suavidad, recuerda que los frenos están muy rígidos y el calor excesivo puede hacer que se deformen; toma en cuenta esto por lo menos durante los primeros 200 kilómetros, claro, a menos que sea una situación de emergencia.
8. No sobrecargues tu vehículo ya que mientras más peso lleva, más esfuerzo realiza el motor; si no te queda de otra, trata de no recorrer distancias muy largas con el vehículo sobrecargado.
9. No pases por charcos a altas velocidades ni intentes derraparte; las llantas tienen una capa de barniz en la banda de rodadura que les resta adherencia, esta capa se elimina después de 500 kilómetros de rodadura.
10. Puedes sacar el coche a carretera mientras lleves a cabo los cuidados anteriores, aunque la mejor forma de que un coche se adapte a todo tipo de movimientos es en el ajetreado ritmo de una ciudad, ya que son distancias cortas con velocidades variables.





¿Asientos de Piel o de Tela para tu auto?

A la hora de adquirir un auto, existen factores determinantes en nuestra decisión de compra; uno de ellos es el nivel de equipamiento. Un detalle que nunca pasamos por alto: el tipo de vestiduras.
Algunas personas prefieren los asientos de piel porque se ven más lujosos, otros prefieren los de tela porque los consideran más acogedores.
Por eso, a continuación te presentamos los pros y los contras de ambos tipos de vestiduras.
Asientos de piel
Asientos de piel

Pros
  • Son más elegantes tanto a la vista como al tacto y hacen lucir mejor a tu auto. Aunque tu vehículo no sea tan lujoso, los asientos de piel le darán ese plus para que suba un peldaño.
  • Su mantenimiento es más fácil ya que no absorben líquidos y además existe un sinfín de productos, líquidos, hidratantes y toallas para protegerlos y evitar que se decoloren con el tiempo.
  • Si tiene asientos de piel, tu auto tendrá un mayor valor de reventa.
Contras
  • Cuando hace calor se calientan mucho y se vuelven pegajosos al contacto con la piel.
  • A diferencia de un auto con asientos de tela, uno con piel cuesta entre 7 mil y 10 mil pesos más.
  • Ahora que está de moda ser "verde", los asientos de piel no resultan muy amigables con el medio ambiente ya que su uso implica la muerte de uno o varios animales.
  • En invierno son más fríos y tardan más en calentarse.
  • Son más resbalosos; en una curva cerrada puedes terminar en el asiento del copiloto.
  • Son más sensibles a rayones y rasguños de mascotas.
Asientos de tela vs. asientos de piel

Asientos de tela

Pros
  • Son más resistentes a la temperatura y, haga frío o calor, siempre van a mantenerse templados.
  • Proporcionan un mayor agarre.
  • Son más accesibles y, aunque existen diferentes variedades y calidades de tela, nunca va a ser tan cara como la piel.
  • Son suaves y acogedores; su calidez hace que mucha gente los prefiera.
Contras

  • Absorben todo tipo de líquidos y manchas. Si se te derrama una bebida, los asientos la absorberán inmediatamente y dejarán una mancha que, si no es permanente, te costará más trabajo retirarla.
  • Su mantenimiento es más caro y complicado; para limpiarlos hay que llevarlos a un establecimiento que se especialice en lavado de interiores y además de que te tomará más tiempo, también implicará un gasto mayor.
  • También absorben todo tipo de olores ambientales como a cigarro y comida y tardará mucho tiempo en que desaparezcan.
  • No son tan elegantes como los de piel.
  • Sin importar el tipo de vestiduras que elijas ya sea por gusto o por presupuesto, lo más importante es el mantenimiento que les des para que tu auto siempre luzca como nuevo.